Las rabas de calamar, son probablemente, las de más éxito. Y no es de extrañar ya que, esa mezcla del calamar con esa capa crujiente en su exterior, lo convierten en una receta 10. Su elaboración es muy fácil y sencilla.
Las rabas de calamar, son probablemente, las de más éxito. Y no es de extrañar ya que, esa mezcla del calamar con esa capa crujiente en su exterior, lo convierten en una receta 10. Su elaboración es muy fácil y sencilla.
Mezclamos en un bol amplio la harina y la cerveza bien fría, o la bebida que hayamos elegido, debería quedar una especie de crema un poquito espesa.
Echamos las anillas ya salpimentadas en la mezcla, y nos aseguramos que queden bien impregnadas con ella.
Después, tapamos el bol y lo metemos en la heladera durante unos 15 minutos, la idea es que esté todo bien frío para que la masa se asiente bien sobre las anillas.
Pasado este tiempo, tomamos las anillas de calamar, quitamos el exceso de masa que puedan tener y las metemos alrededor de un minuto en abundante aceite de oliva, muy caliente.
Es mejor no echar muchas a la vez para no enfriar el aceite y no dejarlas más de un minuto, para que el calamar quede en su punto.
Cuando estén doradas por fuera, estarán listas.
El calamar se cocina muy rápido, escurrimos sobre papel de cocina, para asegurarnos que las rabas de calamar mantengan su crujir.
Por Lorena
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