El pollo guisado con verduras es una receta típica de la abuela, además, como casi todos los guisos, son muy económicos de hacer, también es fácil y se hace de forma relativamente rápida. Lo mejor que tienen este tipo de recetas es que, con una pieza de pollo, podrán comer varias personas.
Cortamos el pollo, si lo tenemos entero, quitamos las pechugas y los muslos del pollo de la carcasa y la reservamos. Si tienes muslos de pollo, obviamente no es necesario que realices este paso.
Lo bueno de hacerlo con un pollo entero, es que puedes hacer un caldo con la carcasa, cubriéndola de agua y dejándola cocinarse a fuego suave durante 1 hora, y obtendrás un delicioso caldo que podrás aprovechar para después.
Salpimentamos el pollo y en una olla alta, ponemos un chorrito de aceite de oliva a calentar a fuego fuerte, una vez caliente añadimos el pollo y lo sellamos por todas sus caras.
Una vez haya tomado algo de color, lo retiramos y bajamos el fuego, en el mismo aceite que hemos cocinado el pollo añadimos la cebolla, los pimientos y los dientes de ajo, todo bien picado.
Salpimentamos y dejamos cocinar unos 5 minutos a fuego suave, removiendo con frecuencia.
Pasado el tiempo, añadimos el tomate triturado y las hojas de laurel y mezclamos con el resto de ingredientes, cocinamos unos 10 minutos más.
Cuando el tomate haya reducido a más de la mitad, añadimos el vino blanco y dejamos cocinar hasta que casi se haya evaporado todo el líquido, unos 3 minutos más.
Volvemos a añadir el pollo a toda la preparación y mezclamos bien, después, cubrimos con el caldo del pollo, si no tienes caldo puedes poner tan solo agua.
Dejamos cocinar a fuego medio durante unos 40 minutos más, hasta que el pollo esté tierno y se hayan entremezclado todos los sabores.
Servir con generosa guarnición de verduras y espolvorear con perejil picado.
Por Lorena
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