Esto, aparte del tema de la rapidez, tiene una ventaja en el sabor, los buñuelos quedan más verdes, más crocantes, con el sabor suave de la espinaca cruda (aunque se cocina un poco durante la cocción), que es muy diferente al de la espinaca cocida.
Esto, aparte del tema de la rapidez, tiene una ventaja en el sabor, los buñuelos quedan más verdes, más crocantes, con el sabor suave de la espinaca cruda (aunque se cocina un poco durante la cocción), que es muy diferente al de la espinaca cocida.
Lavar la espinaca, escurrirla y cortar en tiras lo más finas que puedas, se puede picar también y picar el ajo.
Batir el huevo y, cuando esté bien batido, agregar la crema o leche, unir bien y salpimentar.
Agregar a la mezcla la espinaca y el ajo y revolver bien.
Incorporar la harina, si es posible tamizada, y mezclar bien, debe quedar una mezcla espesa, no una masa, pero bien espesa porque formaremos los buñuelos de acelga con cuchara, si es necesario, agregar un poco de harina.
Calentar aceite para freír y, de a uno, ir poniendo cucharadas de la mezcla para que se frían, dorar de ambos lados, dando vuelta a mitad de la cocción.
Estos buñuelos de espinaca se hacen rapidísimo, aproximadamente un minuto de cada lado, así que no te muevas de al lado de la sartén y ten a mano la fuente con papel absorbente para sacarlos.
Servir como guarnición o como entrada, a mí me encantan con limón.
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